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Líderes Indígenas Denuncian Masacre en Territorio Mayangna

En medio de un denso hermetismo se logra apenas saber de manera extraoficial que un grupo armado de aproximadamente 80 personas al que identifican como “el grupo armado Kukalón” irrumpió la tranquilidad de la comunidad Alal, Indígena Mayangna, en Bonanza, a 400 kilómetros al noreste de la ciudad capital, Managua.
 

Según Gustavo Sebastián Lino, presidente del territorio Mayagna Sauni As, y otros miembros de organismos de derechos Indígenas que han sido entrevistados por distintos medios denuncian que este hecho violento dio como resultado la muerte de 6 Indígenas Mayangnas y otros 10 desaparecidos, tras la quemas de varias viviendas. Las personas desaparecidas son miembros del gobierno comunal y guardabosques de la comunidad.  Las mujeres, niños, ancianos y personas con capacidades diferentes se encuentran refugiadas en Musawas.
 

Alal es la comunidad más alejada del territorio Mayagna Sauni As, dentro del territorio en donde el  Pueblo Indígena Mayagna ha vivido históricamente y lo cual ha sido declarado de una reserva de biosfera llamada Bosawas, en el departamento de Jinotega (frontera con Honduras), compartida por la Región Autónoma de la Costa Caribe Norte (RACCN) y en una pequeña parte por el departamento de Nueva Segovia en Nicaragua. Fue declarada Reserva de la Biosfera por la Unesco en 1997. Constituye la mayor reserva forestal de Centroamérica y la tercera mayor a nivel mundial y es uno de los mejores ejemplos de bosque tropical húmedo y de bosques de nubes de la región. Sin embargo debido a la invasión y el despale incesante, y el incremento de la frontera agrícola está cada día pierde fuerza y con ella sus comunidades. 
 

En 2001, los Mayangna ganó un caso histórico en el Corte Interamericana de Derechos Humanos contra el gobierno de Nicaragua, conocido como el caso Awas-Tingi, resultando que los Pueblos Indígenas tengan derecho a sus territorios colectivos. En 2008, el gobierno cumplio en delimitar y titular el territorio de un total de 73,394 hectares.
 

Desde ese entonces, los líderes comunitarios han denunciado en reiteradas ocasiones el armamento militar a mano de personas no Indígenas, quienes se adentran al territorio estableciendo temor para la expropiación y descontrol de los recursos naturales. Por ello desde esa fecha hasta ahora,  a estas personas les han llamado ‘colonos’ y en numerables veces autoridades Indígenas han demandado al gobierno saneamiento territorial, lo que significa hacer valer sus derechos y expulsar a las personas que están invadiendo ilegalmente al territorio Indígena.
 

“Nuestras comunidades han sido amenazadas, masacradas y explotadas.  Hemos visto que el gobierno ha hecho decretos y acciones que sólo quedan en papeles.  Una de ellas es la creación del batallón ecológico que fue pensado para dar seguridad a nuestras comunidades y no hemos visto su trabajo. Ante esta situación necesitamos que de inmediato el gobierno ponga manos en el asunto y realice lo más pronto posible el saneamiento.”, destacó Lino al medio de Comunicación Digital Nicaragua Actual.
 

Por su parte, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó el ataque producido en la comunidad Alal y denunció que “el Estado incumple obligaciones internacionales de proteger la integridad, vida y territorios indígenas si no previene, investiga y castiga estos hechos”. La CIDH también enfatizó que “este patrón de ataques viene repitiendo en Nicaragua hace años. El Estado debe adoptar con urgencia políticas integrales para proteger el derecho de los pueblos Indígenas a la vida, la integridad y el territorio”.
 

“Al respecto, #CIDH recuerda que este patrón de ataques viene repitiendose en #Nicaragua hace años. En este sentido, el Estado debe adoptar con urgencia políticas integrales para proteger el derecho de los pueblos Indígenas a la vida, la integridad y el territorio.”— CIDH – IACHR (@CIDH) January 30, 2020


La Policía Nacional de Nicaragua mediante el comunicado de prensa No.23-2020 emitido un día después del hecho violento (29 de enero 2020), no precisa información de secuestros y sin dar mayores detalles enfatizan que se encuentran realizando peritaje de la muerte de dos personas con heridas de bala.  El Gobierno de Nicaragua por medio de las instituciones que se espera deberían atender estas problemáticas, tal es el caso del Ministerio de Ambiente y de los Recursos Naturales-Marena quien es rectora en las Áreas Protegidas y el Ejército  de Nicaragua junto con el creado Batallón Ecológico encargados de la seguridad de la zona aún no se han manifestado de manera pública, sólo se sabe de manera extraoficial que una comisión de 30 personas se encuentran en Bonanza haciendo investigaciones.


Cultural Survival repudia estos hechos de violencia contra comunidades Indígenas y se une a los líderes Mayangnas en llamar al gobierno de Nicaragua a cumplir con leyes domésticas e internacionales al saneamiento del territorio Indígena y sus Pueblos; además de respetar el derecho humano más fundamental, el derecho a la vida y la seguridad de la persona. Cultural Survival llama a las autoridades en Nicaragua a investigar y hacer pronta justicia  para las víctimas de la masacre.

 

Foto: Comunidad Mayangna Bosawas, Nicaragua.  Por Alba Sud Fotografia/ Alam Ramírez Zelayaa.