Existe un sentimiento de empoderamiento que se obtiene de la unificación de los Pueblos Indígenas. La mañana del 18 de enero de 2019, cientos de Indígenas se reunieron en los escalones del Edificio de Asuntos Internos en Washington, DC, con un solo pensamiento y una sola voz: inaugurar la marcha de los Pueblos Indígenas. El día comenzó con una oración que se realizó en conjunto y con un llamado a las cuatro direcciones. Todos saludamos a cada punto cardinal.
Los asistentes se adornaron con pinturas tradicionales, plumas y atuendos mientras hacían sonar sus tambores y sonajeros. Los idiomas que se cantaban en las canciones eran diversos, había personas de todas las edades y un ambiente muy colorido. Las interrelaciones entre las comunidades Indígenas que han existido durante miles de años continúan hoy, y son las que nos hacen estar tan cerca. Nunca podremos aceptar las fronteras que pretenden dividirnos. Fue hermoso ver las reuniones que daban comienzo con fuertes abrazos y el intercambio de sentimientos entre la gente presente. La energía y la fuerza que uno puede recibir de ese intercambio es un cambio de vida.
Había ancianos entre la multitud, quienes también estuvieron presentes durante la toma de posesión de la Oficina de Asuntos Indígenas en 1972. Del 3 al 9 de noviembre de dicho año, un grupo de alrededor de 500 miembros del Movimiento Indígena Americano llegaron al edificio de Asuntos del Interior, como parte de la culminación de un viaje a través del país por el Sendero de los Tratados Rotos. Dicha travesía se realizó para llamar la atención sobre temas nativos, como los estándares de vida y los derechos de los tratados. Es posible que muchos de estos ancianos no se hayan visto desde ese año. Ser testigo de la alegría que tuvieron al ver a la generación más joven mantenerse solidaria y en oración, fue increíblemente conmovedor. La fuerza de la energía de la conexión intergeneracional, junto con la diversidad entre los Pueblos Indígenas del mundo, no solo nos unió el 18 de enero, sino que continúa unificando a nuestros pueblos a nivel mundial.
Al terminar la oración de la mañana, nos movilizamos para marchar desde los escalones de la Oficina de Asuntos Interiores hasta el Memorial de Lincoln. Las canciones y gritos que se escuchaban a través de los edificios y las calles de Washington, transmitían un sentimiento poderoso en todo el mundo cuando comenzamos a marchar. Marchamos para dar voz a los Pueblos Indígenas, marchamos por las mujeres Indígenas asesinadas y desaparecidas, por las agraviadas por la brutalidad policial, marchamos para honrar y defender nuestras tierras y aguas sagradas, para proteger a nuestros hijos.
Con tanta vulneración que está ocurriendo en nuestras comunidades y hacia nuestros derechos, es importante que el mundo nos vea reunidos y que reconozca que lo que está sucediendo en una comunidad, está sucediendo en todas partes. Compartir nuestras historias también fue revelador para quienes asistieron. Los medios de comunicación con más repercusión no tienen ningún interés en cubrir todo lo que hacemos como Pueblos Indígenas, especialmente con lo que nos está sucediendo. Pero cientos de grupos de medios populares y clandestinos documentaron la marcha y captaron muchos momentos y situaciones desde nuestra perspectiva. Mientras nos dirigíamos por el sendero que rodeaba el estanque frente al Memorial de Lincoln, el aspecto de la multitud cambió y se fue extendiendo. Cuando finalmente llegamos a las escaleras del estanque, había cientos de personas esperando nuestra llegada. Fue hermoso ver las sonrisas de los rostros de la gente, todos pudimos sentir que nuestros antepasados estaban entre nosotros y también sonreían.
State Representative Deb Haaland (D-NM, Pueblo of Laguna) addresses the crowd at the Indigenous Peoples March. Photo courtesy of Deb Haaland.
Algunos de los casi 100 oradores incluyeron a la Congresista Debra Haaland (D-NM, Laguna Pueblo); Roberto Borrero (Taino); los activistas aborígenes en pro de los derechos Indígenas Kaleesha Morris y Latoya Aroha Rule; Lance Gumbs (Nación Shinnecock); Miss Universo 2015; Ashley Callingbull (Nación Enoch Cree); Sarah Eagleheart (Oglala Lakota) de Nativos Americanos en Filantropía. También hablaron Chase Iron Eyes (Tribu Sioux) de Lakota; Tara Houska (primera nación Couchiching ) de Honor a la tierra, y Ruth Buffalo (Mandan, Hidatsa y nación Arikara) de la legislatura estatal de Dakota del Norte. Algunos de los artistas Indígenas que participaron en la marcha fueron Supaman; Hobawea Nahish, Demaray, Terrance Jade, SayLove, Alex Brittany, Phillip Lopez, Stuart James y Jimmy C, Prowess, The Testament, Quese IMC, Doc & Spencer, Clara Kent, Tufawon, OPLIAM, Natanni Means, Reve Kalell, Def-I, NonChalant, y Malik Yusef.
La pasión de los oradores llamo la atención de muchas personas que venían a visitar el Lincoln Memorial. Nosotros, como pueblos Indígenas, somos conscientes de las injusticias que ocurren en nuestras comunidades y hemos estado protestando a todo pulmón sin ser escuchados. Esta marcha atrajo la atención de todo el mundo. Las personas que estaban completamente desinformadas, ahora son conscientes de la problemática. También hay personas que han preguntado cómo pueden participar y ayudar a defender nuestras causas.
La Marcha de los Pueblos Indígenas (P.I) fue la primera de su tipo y fue un evento fuera del Movimiento de los P.I. Todos los que asistieron a la marcha, todos los que no estaban, o cualquiera que no había oído hablar de la marcha hasta que sucedió, puede ser parte del movimiento. La marcha fue solo el comienzo. El movimiento es un colectivo de Pueblos Indígenas de naciones de todo el mundo, que se unen en la lucha contra los problemas que dañan nuestras tierras, pueblos y culturas respectivas. Los opresores tienen la misión de silenciar nuestras voces, pero eso nunca sucederá. Solo conseguirán hacernos más fuertes y más grandes.
Hay cuestiones que afectan a hombres, mujeres, niños, y espíritus Indígenas. Los Indígenas de América del Norte, Central y del Sur, Oceanía, Asia, África y el Caribe son objeto de genocidios. Actualmente, muchas personas Indígenas son víctimas de la supresión de votantes y las familias están divididas por muros y fronteras. Nos enfrentamos a un holocausto ambiental, a la trata de personas, a la brutalidad policial y militar, con poco o ningún recurso para combatirlos, y una falta de conciencia global sobre estas injusticias.
Hay algo acerca de la unión física. El mundo en el que vivimos tiene tanta tecnología que las personas se preguntan por qué deberían tomarse el tiempo para reunirse en persona, en tiempo real. Como pueblos aborígenes, tenemos una tremenda cantidad de poder sagrado, especialmente cuando nos unimos. La tecnología solo nos permite difundir este poder una vez que nos unimos. Se recomienda a todos los que lean este artículo que compartan una publicación, compartan fotos, compartan videos, se inspiren para crear arte o escriban ensayos y artículos sobre el Movimiento de los Pueblos Indígenas. Difundir esta energía es tomar acción. Obliga a despertar a los que no quieren ver nuestras injusticias. También responsabiliza a los que ocupan puestos de liderazgo y autoridad.
Muchas personas no apoyan las marchas porque no creen en su efectividad. La Marcha de los Pueblos Indígenas fue más que una marcha, fue una reunión para unir a algunas de las personas más comprometidas de todo el mundo y realizar acciones. Las iniciativas de base suelen comenzar con pocas personas, pero a medida que más y más esfuerzos de base se unen, se convierten en un colectivo global, y dan lugar a que se pueda hacer algo acerca de los problemas en nuestras comunidades. Las marchas unen a la gente, lo que hace que nuestras voces y nuestra red sea más fuerte, hasta el punto de hacer que no podamos ignorar aquello por lo que estamos marchando.
Cuando se eliminan las barreras de clase y etnia, y se trata de derechos humanos, lo que sucede en nuestras comunidades puede convertirse en parte de las conversaciones globales. Cuando funcionarios electos como Haaland, no solo asisten a la marcha, sino que hablan sobre las injusticias que ocurren en las comunidades Indígenas frente al Lincoln Memorial, en Washington, DC, se transciende más allá de la marcha; su repercusión llega hasta el mismo Congreso.
Este movimiento está ocurriendo justo a tiempo. La debilidad de nuestra propia gente que lucha para tomar la iniciativa en nuestras comunidades exige un movimiento, o de lo contrario pereceremos. Lo bello es que las personas se están despertando, no solo una por una, sino en grupos. Estos grupos se están uniendo como uno solo, y el movimiento está creciendo cada vez más. El propósito del movimiento se cumplirá. Queremos eliminar las fronteras de nuestras injusticias. El pulso de las comunidades Indígenas de todo el mundo nos exige hacerlo.
--Chenae Bullock (Shinnecock / MontauK) es una mujer Indígena tradicional, protectora del agua, conservadora del patrimonio cultural y humanitario. Fue una de las organizadoras de la Marcha de los Pueblos Indígenas. Síguela en @aponiwind.
Para informarse más sobre la Marcha de los Pueblos Indígenas, visite: movimiento de Pueblos Indígenas. com o siga @Ingigenouspeoplesmovement.